Documentos necesarios para comprar un coche usado

Los documentos necesarios cuando se va a comprar un coche de segunda mano o un coche usado son los siguientes:

Precios al comprar un coche de segunda manoEl vendedor debe disponer de la ficha con las características técnicas del vehículo y del permiso de circulación firmado en el dorso. Asimismo, debe mostrar los recibos anuales correspondientes al pago del Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica. Además, si el coche tiene más de cuatro años, debe tener en regla y al día el certificado de haber superado la Inspección Técnica de Vehículos (ITV).

En cuanto a los trámites legales, tanto el vendedor como el comprador deben rellenar y firmar el impreso de transferencia de vehículos y el formulario de solicitud de transferencia. Estos dos documentos junto con el resguardo del pago del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales deben presentarse en la Jefatura Provincial de Tráfico.

El comprador debe hacerse cargo del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales para lo cual hay que acudir a la Consejería de Hacienda, donde tendrá que pagar el cuatro por ciento del precio del vehículo en el mercado en ese momento, dicho precio lo estiman en la propia Consejería de Hacienda en base a los años del coche, es decir, no se trata del precio real que hayamos pagado por el vehículo. Una vez que se haya abonado el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y lo presentemos en la Jefatura de Tráfico, esta emitirá el nuevo permiso de circulación a nombre del comprador.

Lo normal es que si hemos comprado el coche de segunda mano en una tienda o concesionario oficial, sean ellos los que se encarguen de realizar todos los trámites legales. Si la transferencia del vehículo de segunda mano se realiza entre particulares, deberemos realizar los trámites nosotros mismos, lo que resulta sencillo pero suele llevar bastante tiempo, o bien contratar los servicios de una gestoría.

Cuando la compra del vehículo usado se realiza en una tienda o concesionario, éstos deben ofrecer obligatoriamente una garantía de un año sobre los posibles problemas y desperfectos que pueda tener el coche aunque dichos desperfectos no sean detectables a simple vista.